¿Quiénes somos?
Fundación Mi casa
«La Fundación Mi Casa, un proyecto de la Iglesia Luterana Nueva Jerusalén, se ha convertido en un pilar fundamental de nuestra comunidad. A través de una educación integral basada en valores cristianos, formamos a futuros líderes capaces de transformar su entorno. Nuestro compromiso es construir un nuevo modelo educativo que promueva el desarrollo integral de cada estudiante y fomente una sociedad más justa y equitativa.»
MISIÓN:
“Somos una institución que contribuye a mejorar la calidad de vida de niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos mayores en situaciones de vulnerabilidad, promoviendo el desarrollo personal a través de acciones equitativas, sostenibles, integrales y resilientes”
VISION:
“Ser una organización reconocida y comprometida con la sociedad, transformando realidades y aportando con el desarrollo de niños, niñas, adolescentes, jóvenes, adultos mayores y sus familias. Proporcionando igualdad de oportunidades en el cumplimiento de sus metas personales y sociales. Fomentando un futuro más digno y justo”
CODIGO DE ETICA
1. Respeto y dignidad
Nos comprometemos a tratar a todas las personas, con respeto, empatía y dignidad en todas nuestras interacciones. Enfocándonos en niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos mayores.
2. Promoción del bienestar
Nos esforzamos en promover el bienestar integral de las personas vulneradas, brindando apoyo emocional, físico, educativo y psicológico según sus necesidades individuales, respetando su autonomía y derechos.
3. Transparencia y honestidad
Mantenemos altos estándares de transparencia y honestidad en todas nuestras acciones y comunicaciones, asegurando que nuestros beneficiarios, colaboradores y donantes confíen en nuestra integridad.
4.Sostenibilidad y responsabilidad
Nos comprometemos a trabajar de manera sostenible, asegurando que nuestras acciones no comprometan el bienestar futuro de las comunidades que servimos y asumiendo la responsabilidad de nuestras decisiones y su impacto.
5. Equidad e inclusión:
Actuamos con equidad e inclusión, reconociendo y valorando la diversidad de las personas y comunidades a las que servimos, asegurando que todos tengan acceso igualitario a nuestros servicios y recursos.
6. Mejora continua:
Buscamos constantemente formas de mejorar nuestra labor y maximizar nuestro impacto, mediante la evaluación regular de nuestras prácticas, el aprendizaje de nuevas estrategias y la adaptación a las necesidades cambiantes de las personas vulneradas.